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El Mesilato de Imatinib (nombre comercial Gleevec) es un inhibidor selectivo de la tirosina quinasa producida por el oncogén de fusión BCR-ABL. Este fármaco es usado para tratar ciertos tipos de cáncer, específicamente, se emplea en el tratamiento de Leucemia Mieloide Crónica (LMC) y la Leucemia Linfocítica Aguda con cromosoma Filadelfia positivo (LLA Ph+), ciertos tipos de tumores del estroma gastrointestinal (GIST), síndrome hipereosinofílico (HES), leucemia eosinofílica crónica (CEL), mastocitosis sistémica y síndrome mielodisplásico. La Leucemia Mieloide Crónica (LMC) se caracteriza por la presencia de la anomalía genética conocida como BCR-ABL1, la cual se origina por la translocación entre genes denominada t(9:22)(q34.1; q11.2). Esta anomalía ocurre cuando los cromosomas 9 y 22 se rompen e intercambian partes entre el oncogén ABL1 (localizado en el brazo largo del cromosoma 9) y el gen BCR (localizado en el brazo largo del cromosoma 22), lo que da lugar a una versión corta del cromosoma 22 (cromosoma Filadelfia o Ph) y a la generación de un nuevo gen de fusión denominado BCR-ABL1, el cual es considerado un oncogén. Este nuevo oncogén produce la oncoproteína de fusión BCR-ABL1. El componente ABL1 de esta oncoproteína presenta actividad tirosina quinasa no regulada dirigida al citoplasma que permite que las células proliferen sin estar reguladas por citocinas, lo que a su vez permite que las células se vuelvan cancerosas. Así, la presencia de la oncoproteína BCR-ABL1 desempeña un papel central en el fenotipo proliferativo de la Leucemia Mieloide Crónica (LMC) y la Leucemia Linfocítica Aguda con cromosoma Filadelfia positivo (LLA Ph+). Los avances recientes han dado lugar a una serie de fármacos terapéuticos que inhiben la actividad de la oncoproteína de fusión tirosina quinasa ABL1. Los inhibidores de la tirosina quinasa (TKI, por su nombre en inglés Tirosine Kinase Inhibitor) son el tratamiento de primera línea para la LMC y forman parte de los regímenes de tratamiento recomendados para la Leucemia Linfocítica Aguda positiva al cromosoma Filadelfia (LLA Ph+). El mesilato de imatinib (nombre comercial Gleevec) es el prototipo de los fármacos TKI que pueden inducir remisiones hematológicas y citogenéticas duraderas en la mayoría de los pacientes. El Imatinib se une a los sitios activos de la tirosina quinasa BCR• ABL1 y previene de esta forma su actividad enzimática y corrige la evolución de la enfermedad. La mayoría de los pacientes con LMC mantienen respuestas duraderas al uso del mesilato de Imatinib; sin embargo, muchos de los pacientes que se encuentran en fase acelerada o en fase blástica (crisis blástica) no responden al tratamiento o recaen rápidamente. Un gran número pacientes, alrededor del 30%-50%, puede desarrollar resistencia funcional al TKI debido a la adquisición de mutaciones puntuales en el dominio quinasa (KD) del oncogén BCR-ABL1. Hasta la fecha, se han descrito más de 50 mutaciones distintas, aunque un subconjunto más pequeño de ellas (aprox. 20) representa la mayoría de los pacientes con resistencia clínica al TKI. Asimismo, se ha detectado que los pacientes con una duración más prolongada de la LMC antes del inicio del tratamiento con mesilato de imatinib tienen una incidencia más alta de mutaciones detectables en comparación con los pacientes con un inicio más temprano del tratamiento con mesilato de imatinib. Además, el hecho de que no se logre una respuesta citogenética importante dentro de los primeros seis meses de tratamiento a menudo refleja la presencia de una mutación o una alta probabilidad de que se detecte una mutación posteriormente. El monitoreo molecular en los primeros meses de tratamiento puede desempeñar un papel crucial en la detección de pacientes con alto riesgo de resistencia al fármaco Imatinib. Las mutaciones puntuales dentro del dominio quinasa (KD) del oncogén BCR-ABL1 son el mecanismo más comúnmente identificado asociado a la resistencia al tratamiento con inhibidores de la tirosina quinasa (TKI). La mutación común T315I KD es particularmente importante, dado que esta alteración confiere resistencia a todos los TKI empleados actualmente, excepto Ponatinib. Los ensayos bioquímicos y celulares han demostrado que las diferentes mutaciones del dominio quinasa (KD) del oncogén BCR-ABL1 dan lugar a diferentes niveles de resistencia al fármaco TKI mesilato de imatinib. La presencia de mutaciones en el dominio quinasa (KD) se relaciona con un pronóstico precario y un mayor riesgo de progresión de la enfermedad. El reconocimiento de la resistencia al fármaco es importante en el manejo de la LMC, ya que el efecto de algunas mutaciones puede superarse aumentando la dosis de imatinib, mientras que otras requieren el cambio a un diferente TKI (de segunda generación), una terapia combinada de fármacos o una terapia alternativa. Este estudio puede detectar mutaciones en el dominio quinasa ABL1 de la proteína oncogénica BCR-ABL1 que confieren resistencia al fármaco Mesilato de Imatinib. Es útil para monitorear la eficacia del tratamiento y detectar la aparición de resistencia antes de la recaída clínica e identificar candidatos adecuados para un tratamiento alternativo. Los candidatos para el análisis de mutaciones en el dominio de la quinasa BCR-ABL1 incluyen pacientes que presenten: • Respuesta inicial inadecuada al tratamiento con TKI.
• Cualquier signo de pérdida de la remisión hematológica.
• Cualquier signo de pérdida de la respuesta citogenética completa (CCyR).
• Aumento significativo y sostenido en los niveles cuantitativos de la transcripción del oncogén BCR-ABL1 (entre 0.5 a 1.0 log durante al menos 2 puntos temporales). • Pérdida de la Respuesta Molecular Mayor (MMR) indicada por un aumento en el porcentaje BCR-ABL1/ABL1 a una escala internacional de >1% [IS].
• Progresión de la enfermedad a fase acelerada (FA-LMC) o fase de crisis blástica (FB-LMC). Este ensayo detecta mutaciones puntuales en el dominio de la quinasa (KD) BCR-ABL1, pero no detecta todas las mutaciones posibles en ABL1; por lo tanto, un resultado negativo de este ensayo no excluye la presencia de una mutación presente fuera de la región analizada, una mutación poco frecuente, menos caracterizada o desconocida que podría estar asociada con algún grado de resistencia a los inhibidores de la tirosina quinasa (TKI) y cuyo significado clínico es incierto. El nivel cuantitativo de la transcripción BCR-ABL1 es crítico para un análisis exitoso de mutaciones en el ensayo, ya que la eficiencia de amplificación para un molde de ARN mensajero (ARNm) largo disminuye cuando hay baja abundancia de este. Si el nivel cuantitativo de la reacción en cadena de la polimerasa (PCR) de BCR-ABL1 es demasiado bajo, la amplificación de BCR-ABL1 con transcripción inversa por PCR puede no tener éxito en producir producto para la secuenciación. En general se considera que se requiere un nivel cuantitativo de BCR-ABL1/ABL1 superior al 0.1 % para detectar mutaciones en el DK mediante este ensayo. Las mutaciones subclonales pueden ser difíciles de identificar, incluso si la amplificación del ARNm BCR-ABL1 fue exitosa. Esto se debe al límite inherente del nivel de sensibilidad de la secuenciación. Nombres alternativos: Análisis de mutaciones ABL1 para la resistencia al mesilato de imatinib; Análisis de mutaciones de resistencia a Gleevec; Análisis de resistencia al mesilato de imatinib; Mutaciones de inhibidor de la tirosina quinasa (TKI); Mutación del dominio de la quinasa ABL; Mutaciones del KD; Resistencia a Gleevec; Mutaciones del dominio cinasa ABL1; Mutaciones del oncogén BCR-ABL1.
• lunes a viernes: Muestras tomadas o entregadas al laboratorio antes de las 11:00 am, los resultados se entregan en 23 días hábiles a partir de las 06:00 pm.
• lunes a viernes: Muestras tomadas o entregadas al laboratorio después de las 11:00 am, los resultados se entregan en 24 días hábiles a partir de las 06:00 pm.
• sábados, domingos y días festivos oficiales y organizacionales se consideran días no hábiles.